Findan
Más poeta y diplomático por gusto y preparación que un guerrero, Findan
se encuentra menos cómodo que muchos de sus hermanos de lucha con una
espada. Él prefiere golpear rápidamente y golpear duro, pero a distancia.
Su táctica preferida es debilitar primero a su enemigo con una lluvia
de flechas bien afiladas.
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Alaron
Todos los elfos adoran el ideal de la Armonía, Alaron lo hizo hasta tal
punto que incluso ve a sus enemigos como necesarios y dignos. Mientras
esto podría ser una buena filosofía a escala cósmica, causa grandes dificultades
cuando el líder de unas tropas tiene la tendencia de perdonar y dejar
vivas a las tropas que ataca. Entendiendo la necesidad política de destruir
a otros para preservar su reino, Alaron evita esos momentos siempre que
le sea posible.
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Gilraen
Severo y altamente sensible en cuestiones de honor, Gilraen ha estudiado
mucho y muy duramente los estilos de esgrima élfica. Se ha convertido
en un renombrado maestro de espadas, y es un exigente profesor del arte
de la Danza de Batalla. Su precisión, disciplina, e intensidad son compartidas
también por sus tropas, cuando él conduce a su ejército en una batalla
los combatientes le deben mucho a las horas de entrenamiento que reciben.
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Ylthin
Secuestrada por una partida de Elfos Oscuros esclavistas en su más tierna
infancia, Ylthin fue salvada de su espantoso sino por un vengativo
unicornio. Desde entonces ella adora a esos misteriosos habitantes del
bosque, y ha dedicado su vida a trabajar con ellos. Nadie los entiende
mejor que Ylthin, y su conocimiento le permite utilizar en la batalla
la velocidad y la fuerza de los unicornios de la manera más eficiente.
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Anwen
Anwen defiende los bosques, su flora y fauna con un celo notable incluso
para los estándares élficos. Auto-exiliada en los bosques
sin rieles de Irollan, cuida profundamente de ellos y se ha convertido
en su protectora reconocida. Pobre del enemigo que dañase el bosque
o a los que lo protejen -- cuando Anwen es llamada a la guerra, la diosa
Sylanna lucha a su lado, y su cólera baja como una tormenta sobre
los que dañen lo que ella ama.
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Dirael
Insectos asomando, avispas volando en círculos, abejas ocupadas
-- de niñez Dirael encontró a estas minúsculas criaturas
voladoras hermosas y fascinantes, como preciosas joyas zumbadoras. Ella
estaba tan enamorada de estas criaturas que se hizo druida, para ahondar
mejor en su saber y para entender sus misterios. Ella respondió
a la llamada de la Armonía y fue a la guerra eventualmente, y ahora
sirve a Sylanna convocando a hordas de sus criaturas preferidas para picar
y acosar al enemigo.
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Ossir
Ossir es un perseguidor experimentado y un prodigio con el arco; probablemente
lo mejor en una nación famosa por su habilidad en el tiro. El respeto
que impone le convirtió en una opción natural cuando el
Rey Alaron buscaba a oficiales, aunque Ossir habría preferido permanecer
en sus bosques queridos. Todas las dudas fueron disipadas después
de su primera batalla, sin embargo, al igual que sus tropas beneficiadas
claramente bajo su mando.
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Talanar
Talanar fué el único superviviente de uno de los ataques
brutales de El Día de las Lágrimas de Fuego. Ver a centenares
de parientes muertos alzó al joven guerrero y lo llenó de
una rabia insaciable que vuelve siempre que ve la caída de sus
hermanos en batalla. Su celo para la venganza es tan grande que se transfiere
a los que estén cerca de él; cuanto mayores son las pérdidas
sufren sus tropas, más feroces llegan a ser.
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Vinrael
Vinrael tiene dos cualidades que lo hacen valioso para los elfos - es
inusualmente observador, y ha visto más horas de batalla que cualquier
otro guerrero Sylvano. Sus agudos ojos y los de sus halcones, vagan constantemente
antes, durante, y después de una batalla, estudiando todos los
elementos de tropas, táctica, y el terreno. Analizando sus propias
acciones y las del enemigo, aprende enormemente de los éxitos y
de los errores de ambos bandos.
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Wyngaal
Wyngaal comenzó su vida como un explorador y cazador, pero la cólera
contra los que trastornarían la Armonía Sylvana lo transformó
en un guerrero. Él confía profundamente en el conocimiento
que le otorgan sus años, y sin embargo en sus elaboradas trampas,emboscadas,
y sorpresas. Cualquier tropa del enemigo que haga frente a Wyngaal y sus
fuerzas tienen pocas probabilidades de conseguir una posición ventajosa,
ya que la agudeza y experiencia de Wyngaal le dan un arma definitiva.
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